A pesar de que, normalmente, durante los movimientos retrógrados de los planetas personales no suele moverse nada muy importante externo (bueno, algún correo perdido…), en el periodo actual, con Marte en el signo de Aries y Mercurio en el signo de Escorpio, tengo consultas de amigas con problemas de salud importantes.
Para mí, mercurio retrógrado es casi una bendición. Primero, porque yo nací con mercurio retrógrado y me benefician esas semanas. Y también porque lo vivo como un descanso y una reflexión trimestral. Un bajar el ritmo y conectarme más con mi mundo interno. Una revisión de que todo marcha bien según mis propios valores.
Eso me evita el agotamiento y un sin sentido existencial.
Marte retrógrado es otra cosa. Marte es el planeta de la acción, por lo tanto, para las impacientes como yo es muy frustrante. Hay que esperar. Está en su domicilio, en el signo de Aries. Aries, como primer signo del zodiaco, tiene mucho que ver con mi identidad, mi lugar en el mundo, mi yo. Mi derecho a ser yo misma, a realizar mis deseos caiga quien caiga. Y por supuesto, a decir NO. NO quiero.
Pero el hecho de que amigas y clientas manifestaran problemas de salud me hizo pensar en algo más allá de la coincidencia de estos dos ciclos retrógrados.
Al fin y al cabo, estamos pensando en Aries y en Escorpio.
Son hipótesis, pero a ver si a vosotras os resuenan.
¿Y si se tratara del diálogo interno (mercurio rx) en relación a un maltrato energético hacia nosotras mismas? ¿Qué emociones ocultas estoy manteniendo a raya y se expresan con malestares físicos? ¿tiene que ver con mi energía sexual, con mi sexualidad, incluso con abusos de poder que he sufrido y callado?
No es un tema menor. ¿Cuántas de nosotras ha experimentado ese maltrato, ese abuso, una pérdida significativa y lo ha guardado dentro? Tanto Mercurio como Marte, en los signos de Escorpio y Aries, podrían poner sobre la mesa esto.
Los dos signos hacen una distancia de 150 º, un quinquncio, por tanto, los temas que estén saliendo este mes son más importantes de lo que parece.
Este es el momento perfecto para la terapia profunda, trabajando con la integración de temas de identidad sexual, de acontecimientos que tienen que ver con nuestra sexualidad,
con la expresión de emociones que alguna vez fueron reprimidas, también un buen momento para explorar qué es lo innombrable en nosotras, a qué parte de nosotras le damos la espalda, que pérdidas fueron inasumibles para nosotras en su momento, que estamos dejando atrás en este año para entrar en otra etapa.
Que estamos soñando estos días, que recuerdos vienen y como reaccionamos ante ellos. ¿ Seguimos guardandolos debajo de la alfombra?
El viernes el sol entra en el signo de escorpio, acercándonos a los días en que la frontera entre los vivos y los muertos es más delgada. Un momento único para explorar nuestros miedos y esa parte que no enseñamos a nadie, ese dolor, esa experiencia de indefensión y abuso que hemos sentido en nuestra vida. La rabia es una emoción incomoda, es cierto, pero útil para defender nuestro territorio y evitar esos abusos.
La parada de este mes (voluntaria o no) es una oportunidad de quererse mucho, reconocer todas estas emociones, y tratarse muy bien. Se están disparando reacciones de supervivencia ante la incertidumbre que nos ha tocado vivir, y tú puedes elegir como vivir este momento.
Cuando mercurio inicie movimiento directo, a principios de noviembre, y Marte, a mediados, seguramente habremos hecho los ajustes necesarios para acabar con dignidad este año.
Las áreas donde puedes vivir estos ajustes son, en tu carta natal, serán las casas donde estén los signos de escorpio y Aries. Te sorprenderá descubrirlo.
Comentame si lo estas viviendo asi, o es solo una neura mia.
Gracias
